Hola,
Mi nombre es José Gil. He encontrado este blog abandonado, lleno de objetos perdidos, sin dueño aparente -al menos nadie me lo ha reclamado hasta ahora- y me ha parecido interesante sacarlos del limbo en que se hallan. Alguno de los insignificantes objetos que lo pueblan muestran unas diminutas iniciales, con letra apenas legible, algo como una  A y una R que no sé  que representan, pero que no creo que sea nada significativo. Junto a ellos iré depositando esas cosas que me vaya encontrando a diario y que hasta ahora iba dejando perdidas por ahí. Bajo la cama, junto al televisor, en ese rincón remoto adonde nunca nada llega, ni siquiera las estúpidas pelusas, tamos de mi rutina peripatética.

Alguna de estas primeras imágenes son probablemente anteriores a mí mismo y a la existencia del propio blog. Puede que incluso ya existieran  antes de la red y que anduvieran errantes por el plasma de las pantallas invisibles procurando una donde aposentarse forever and ever. He aquí alguno de esos encuentros admirables de la que he dado en llamar mi primera fase: